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Los talones agrietados son un problema muy común, que afecta a nuestros pies durante cualquier época del año. Sin embargo, ahora que llega el buen tiempo y se acerca el momento de volver a lucir tus sandalias y zapatos de verano, ¿te gustaría saber qué debes hacer para que estas grietas en los talones desaparezcan? Pues, ¡sigue leyendo y toma nota!

¿Talones secos y agrietados? Éstas son sus causas

La piel es nuestra barrera protectora más efectiva, pero, cuando hablamos de los pies, muchas veces olvidamos cuidar de esta parte del cuerpo como se merece y solo nos preocupemos de problemas como las grietas en los pies cuando ya es demasiado tarde.

¿Cuáles son las causas de los talones agrietados? La piel de esta zona se caracteriza por contener un mayor número de células adiposas, por lo que es mucho más gruesa que la del resto del cuerpo. Este espesor es necesario para amortiguar el roce continuo al que se ven sometidos al caminar. Por otro lado, la piel de los pies también contiene menos grasa, por lo que pierde humedad más fácilmente.

Los talones secos y agrietados son una manifestación física de esta falta de hidratación. Cuando la piel se seca, se endurece y como consecuencia, se rompe más fácilmente, dando lugar a la aparición de las grietas en los pies. Tratándolos a tiempo, las grietas en los pies no suelen suponer un problema grave. Sin embargo, si la situación se agrava pueden aparecer grietas dolorosas en los talones, que pueden llegar a sangrar, o fisuras, más profundas y difíciles de eliminar.

Además, también debemos tener en cuenta que la presión continuada que soportan nuestros pies a lo largo del día también favorece que la piel se reseque y aparezcan grietas en la piel.

Talones agrietados: síntomas y factores de riesgo

¿Cómo podemos saber si la piel de nuestros pies está bien hidratada? Además de sentirla más dura y áspera al tacto, la deshidratación también puede provocar el enrojecimiento de la piel, una mayor sensibilidad, descamación o picor. Si esta situación persiste, la piel se tornará rugosa, adquirirá un tono más blanco o amarillento y finalmente, aparecerán las grietas en los pies.

Como hemos comentado en el epígrafe anterior, la falta de humedad y el exceso de fricción son las dos causas principales de los talones agrietados, pero también existen algunos factores de riesgo que es importante considerar para prevenirlos. Tomar baños muy calientes o demasiado largos, por ejemplo, afecta de forma negativa a la hidratación de nuestros pies. De igual forma, andar descalzos habitualmente también hará que la piel de nuestros pies se reseque si no la tratamos adecuadamente. 

Talones agrietados: ¿cómo curarlos?

En el caso de los talones agrietados, cuidar adecuadamente la piel de nuestros pies es la mejor forma de prevención. Pero, ¿cómo podemos quitar las grietas de los talones cuando ya han aparecido? Si sufres de grietas en los talones, necesitas un plan de choque rápido y eficaz para que tus pies recuperen su nivel natural de hidratación. Para ello, lo más efectivo es usar cremas o lociones específicas para grietas en los pies o talones agrietados. 

Estos productos son humectantes, es decir, ayudan a que la piel retenga la humedad y, como consecuencia, la suaviza. Muchos también incluyen principios activos naturales como la urea, fabulosa para recuperar las pieles secas y estropeadas y olvidarte de los talones secos.

Estas cremas específicas actúan bastante rápido, pero, si quieres evitar que las grietas en los pies reaparezcan, no descuides su hidratación. Si tu piel está sana, lo más indicado es usar diariamente una crema hidratante específica para esta parte del cuerpo.

Cuidados para prevenir los talones agrietados

Cuando se trata del cuidado de la piel, los pies suelen ser unos de los grandes olvidados. Piensas en tu rutina diaria de aseo y cuidados personales. ¿Tus pies están incluidos dentro de ella? ¿Cuánto tiempo le dedicas a su cuidado específico?  A continuación, te damos las claves para olvidarte de los talones secos y agrietados para siempre.

• Calzado adecuado 

A la hora de elegir calzado, prioriza la comodidad sobre el estilo, sobre todo si sufres habitualmente de grietas o dolores en los pies. Escoge un calzado cómodo y amplio, preferiblemente sin costuras y con un tacón moderado, no superior a 3 centímetros. También es importante que la suela ofrezca una buena amortiguación y que el pie quede bien sujeto en la zona del talón. El uso de sandalias y chanclas, por ejemplo, está muy relacionado con la aparición de grietas en los talones, ya que deja expuesta la piel.

• Plantillas para reducir la fricción

Como hemos comentado anteriormente, la fricción es una de las causas principales de los talones agrietados. Por esta razón, incluir unas plantillas en tu calzado de uso diario es una medida muy recomendable para reducir la presión a la que está sometida la planta del pie. Esta es una de las funciones básicas de cualquier tipo de plantilla, pero, si se trata de mejorar la amortiguación, las plantillas de gel o silicona son una opción altamente recomendable por su capacidad de absorción de impactos y su comodidad.

Las plantillas, además, también permiten mejorar la sujeción del calzado y distribuir el peso corporal de forma uniforme a lo largo de toda la planta del pie, reduciendo la presión sobre el talón o los dedos, lo que también será de gran ayuda para prevenir los talones agrietados.

• Mima tus pies cada día
  • Hidrata tus pies a diario, preferiblemente antes de irte a dormir. Aprovecha para realizarte un pequeño masaje en toda la planta del pie, incidiendo en el talón. Así, te asegurarás de que la piel absorbe la crema y relajarás la musculatura del pie, aliviando las tensiones acumuladas a lo largo del día. 
  • Usa jabones y cremas neutros, menos agresivos con la piel.
  • Mantén una alimentación equilibrada y rica en líquidos, especialmente importante durante el verano, que incluya una ingesta de entre 1,5 y 2 litros diarios. Además de agua, también puedes beber tés e infusiones o comer más frutas y verduras.

Ahora que ya sabes cómo remediar unos talones agrietados, ¡comienza a cuidar tu piel hoy mismo y prepárate para lucir unos pies perfectos este verano!

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