Plantillas Coimbra

¿Estás harto que los zapatos nuevos te molesten y te hagan ampollas? ¿También te pasa después de verano cuando empiezas con los zapatos cerrados? Si todo esto te ocurre y quieres evitar tener los pies llenos de rozaduras y pequeñas heridas, continua leyendo el post de hoy.

Hoy conoceremos 5 consejos para que nuestros pies no sufran por culpa de los zapatos nuevos, porque los zapatos cerrados como las botas o los tacones acaban siendo un infierno cuando los utilizamos por primera vez, convirtiéndose en algo realmente incómodo.

Para que esto no ocurra y podamos disfrutar y lucir de unos zapatos sin molestias os presentamos 5 trucos que os ayudarán mucho.

Asegúrate de que sean de tu talla

En muchas ocasiones ocurre que un zapato nos encanta, pero no hay nuestra talla. Aun así, lo compramos. Esto es un terrible error, lo ideal es utilizar un zapato de tu talla para que los pies estén más seguros y no aprieten o bailen los zapatos.

Ablanda el zapato          

Antes de salir con los zapatos nuevos a la calle, puedes probarlos por casa para acostumbrar el pie, si te quedan un apretados o no se te adaptan tan rápido como quieres puedes utilizar unas hornas para ensanchar ligeramente el zapato. Si prefieres existen dilatadores para los zapatos.

Usa plantillas

Si el zapato te baila un poco, pero no tanto como para utilizar una talla menos y, además, quieres evitar las heridas por culpa del roce y la fricción, te recomendamos que utilices plantillas. Lo ideal sería unas plantillas no muy gruesas para que el pie este cómodo y  que sean transpirables, lo mejor son las Sudex Piel que ofrecen una agradable sensación para el pie, además de tener el tratamiento Sudex, es decir, que es transpirable y hace que el pie no sude y tampoco huela mal.

Ponte desodorante para evitar ampollas

Si prefieres no utilizar plantillas, pero tus siguen sudando puedes ponerte polvos desodorantes para que no se produzca una fricción con el zapatos, creando pequeñas heridas y ampollas.

Evitar la herida

Si al probar en casa el zapato notas molestias y localizas el lugar exacto puedes colocarte una tirita para evitar que aparezcan ampollas. Si se centraliza en los dedos del pie, existen productos, como el Tubo Gel, que protege todo el dedo de las heridas que ya puedas tener o en futuro aparezcan.

Si aun así, el zapato te sigue doliendo, puedes ponerte en contacto con nosotros para ayudarte mejor.

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